sábado, 17 de enero de 2009

Sentimientos Resecos


En la cocina no se tira nada: esa carne cocida que ha sobrado, esos garbanzos en stock, esas corbatas que ya casi no te pones, todo puede ser reciclado con un poco de imaginación, incluso los sentimientos.
Digo más: si no fuera por ese afán de economía no existirían las croquetas, la pizza, la sopa cubierta, el perdón o el sushi de corbata.


Procedimiento:
-Poner los sentimientos resecos a remojo en agua tibia de 10 a 12 horas cambiando el agua 2 veces.
-Una vez hidratados, usarlos como si fueran frescos.

NOTA: hay que tener en cuenta la cantidad que vamos a utilizar, porque los sentimientos resecos aumentan tres veces su tamaño cuando pasan por el agua.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo he visto sentimientos resecos que han llegado a incrementar hasta 10 veces su tamaño. Lo bueno es que al ponerlos en remojo pierden su elevado amargor.

Fande dijo...

Esa es, sin duda, una de las ventajas de este procedimiento, que sin perder la esencia se rebaja la intensidad.
También es cierto que hay sentimientos que es mejor añadirlos sin hidratar, totalmente concentrados, aunque sea en peqeñas dosis.
¿10 veces su tamaño? estarían muy deshidratados desde luego.

canni dijo...

¡Ah! Pues sí se puede. Lo dicho. Uno nunca sabe cuándo los va a necesitar.

Fande dijo...

Pues sí, Canni, son muy apropiados para largos viajes, pesan poco y te pueden sacar de muchos apuros. Deberían venderse en los Coronel Tapioca, porque son muy de supervivencia y aventura.
De hecho, igual que hay una ruta de la seda o de las especias, estoy seguro de que hay una ruta de los sentimientos deshidratados.
Por cierto, me encanta el concepto "sentimientos pachuchillos" que comentaste en otro lugar...
Un beso

Anónimo dijo...

Y lo mejor de todo es lo del peso. Porque en ocasiones se hacen intransportables.
Por cierto, hola. Me encanta.

Fande dijo...

Parito, hija, porque de vez en cuando me da por revisar posts antiguos y veo comentarios nuevos... me encanta que te encante
Besitos!